Excelsior

Domingo 24 de Julio del 2005.

Plástica y poesía de Cristina Ruiz


"A través de mi trayectoria como artista he querido explorar el espacio del amor en todas sus dimensiones. En este libro quiero plasmar una semblanza de esta exploración de totalidad; de un alfa y un omega. De todas las expresiones que el alma pueda vivenciar".

Con estas palabras inició su breve alocución la pintora, escultora y poeta Cristina Ruiz quien el miércoles reunió a amigos y admiradores para la presentación de su más reciente edición amén de una exhibición de su obra plastica: pintura y escultura en el Club de Banqueros de la ciudad de México sitio en 16 de Septiembre y Bolívar en el Centro Histórico.

En el libro de formato medio, la artista reúne dos décadas de trabajo en sus distintas disciplinas evocadas a expresar el amor, de ahí la denominación de Cristina Ruiz como pintora del amor, titulo impuesto por el gran crítico de arte Alfonso de Neuvillate quien esta vez estuvo junto a Enrique Castillo Pesado y Tony Schefler, entre otros muchos personajes, como Cristina Ruiz en el uso de la palabra, estuvo precedida por Alejandro Vargas director de Relaciones Públicas del Club de Banqueros de México.



La artista y el escultor Victor Gutiérrez
En su turno, la poeta comentó "Amar el amor, es el espíritu de mi obra, es recordarlo, ensoñarlo, sublimarlo y finalmente trasmitirlo en un intento por trascender".

"Creo que el amor es uno de los temas más complejos de abordar en la experiencia del ser humano. A lo largo de los siglos, poetas y, místicos se han aventurado en las reflexiones más profundas para apenas alcanzar a tocar la superficie de este espacio para tan sólo descubrir su abismal profundad".

En este libro he querido representar la infinita aventura del amor por diferentes caminos: la pintura figurativa, la abstracción, la escultura y la palabra; todos y cada uno de éstos tiene su propia naturaleza y su propia fuerza, pero todos tienen un solo espíritu. De nuevo es la diversidad dentro de la unidad, es el universo, el todo.


Para la artista quien siempre tuvo la mirada solidaria de su esposo y su hijo Rafael y Carlos Selvas respectivamente, "es poco viable el poder expresar la infinitud de esta experiencia que llamamos amor de una sola manera; com es sabido, existen diferentes formas de amor y diferentes estadíos de éste.

"Eros, o el amor de pareja, es la fusión, la entrega al otro, la catarsis y la muerte, es el perderse en el otro para convertirse en un momento, en una sensación, una experiencia tras personal de clímax, en el que se violan las fronteras del que amas, se transgrede lícitamente al ser amado y se funde uno con él, en la confusión y en la con fusión... Donde todo se parece y nada es igual, donde una mirada en el momento culminante de la fusión es la puerta al alma, un sin sentido de la mente".

Luego habló de los estilos que con su pintura ha logrado manifestarse: del figurativo -muchas veces también para ello, gracias al apoyo de Felisa Hernandez- su modelo quien además durante la presentación del libro leyó una terceta de poemas del abstracto donde "el pincel fluye libremente manejado por la mano y el corazón, donde se percibe igual siempre hay un rincón, un breve espacio de quietud y de luz u oscuridad inexplorado. Habló desde luego, también de la escultura, como la cristalización de la forma en el espacio, con peso, con textura, con frío y calor, con sombra y con luz.

¿Y no es eso acaso la culminacion del amor? Pregunta la artista pára agregar que finalmente, la libertad más plena para ella es la libertad de la mente y el arte es profúndo en expresarse en este terreno, "a través de la poesía que es el encuentro final la poesía del ser" .